………………………………………………………………La Acrobacia en el Teatro
*por José Ezequiel Piñero Velásquez
Cuando se observan las cualidades de todos los seres humanos en cuanto a sus posibilidades expresivas, podemos apreciar los distintos movimientos que pudieran parecer producto de una necesidad de quererse mover a su antojo, pero en realidad se debe a un hecho más particular, que es sin duda, la posibilidad de desafiar sus propios impulsos; de establecer una relación con el entorno y vivenciar cada aspecto que define su sistema orgánico en correlación armoniosa con su espacio tiempo. En este sentido, debemos sostener que la importancia del conocimiento del cuerpo y su expresión se manifiesta como un elemento de suma preponderancia desde nuestro crecimiento, que de por sí ya es una acrobacia el poder mantener el vuelo, los estiramientos y variantes de composición durante la espera de descubrir el mundo exterior. Siguiendo este orden de ideas, podemos resaltar la relación que tiene la formación de la especialidad de la acrobacia en las distintas áreas educativas y artísticas, como es el caso del teatro en el proceso de formación, lo que evidentemente procura y desarrolla el acercamiento entre los participantes, generando desde luego una relación de confianza al intercambiar sus impresiones y capacidades creativas, por otro lado establece la acción reciproca de confianza con el otro, la otra, a fin de intercambiar las diferentes posibilidades de ejercitarse desde lo creativo; permitiendo un mayor entendimiento y compresión de cooperación, a su vez que confronta a los participantes a reepensarse como individuos y como un hecho colectivo. Dentro de estas acertadas consideraciones, con respecto a la necesidad de agregar la acrobacia en el ámbito educativo, sobre todo en los primeros años de formación cultural. Vale destacar, que no es solo el hecho de transferir este conocimiento a los estudiantes o participantes de esta actividad creer que ya hemos logrado el objetivo, creemos que más allá de esto que mencionamos anteriormente, se debe impartir todo aquello que se deriva del arte teatral y sus modalidades como el caso del teatro de imagen, simbólico y de alto impacto. Queda entendido que la acrobacia es una disciplina que puede desarrollarse e incorporarse como metodología de aprendizaje para la disciplina del teatro, ya que esto permite la sistematización de conocimientos en cuanto a las capacidades y nutre desde el punto de vista de la concentración, la atención, el equilibrio, la interrelación personal, permitiendo un encuentro interdisciplinario; el teatro desde la puesta en escena e investigación del cuerpo y su dimensión escénica logra corporalmente abarcar los diferentes puntos de acción, transiciones, mudanzas de ritmos y emociones. También queda de manifiesto que el ejercicio acrobático, atiende desde el trabajo actoral otras capacidades de acción, de pensamiento, a su vez que tiende a la reflexión y reconocimiento espacial, no solo para el hecho creativo ,sino también para sumar los códigos, así como también su decodificación para el ordenamiento de las ideas con sentido estético, lumínico, escenográfico y desde luego, una visión que permite el reconocimiento con los espectadores y el público asistente, bien sea en la sala o en los espacios alternativos; haciendo de ello una multiplicidad dialogante, dialectico, didáctico y un acto de convocatoria de la escena social. Por último necesario decir, la acrobacia tiene aptitudes para toda la vida
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